Magueyes de Tezontepec – 7 de Octubre de 2020

Esta obra del Maestro Héctor Cruz, parte de su serie «Magueyes de Tezontepec», captura con maestría la esencia y el carácter de estas icónicas plantas mexicanas. Realizada alrededor de 2015, la pintura es fruto de las expediciones del artista a Tezontepec, Hidalgo, donde quedó cautivado por los vastos campos de magueyes.

El maguey, protagonista indiscutible, se alza en el centro de la composición con una presencia imponente. Sus hojas, de un verde intenso con matices amarillentos, se despliegan en una forma espiral, creando un juego dinámico de luz y sombra. La técnica del Maestro Cruz se revela en las pinceladas precisas que delinean cada espina y definen la textura rugosa de las hojas.
El fondo, trabajado en tonos cálidos de beige y marrón, evoca la tierra árida y el ambiente soleado de Tezontepec. Estos tonos contrastan dramáticamente con los verdes de la planta, resaltando su resistencia y adaptación al entorno hostil.

Los magueyes, principalmente cultivados para la producción de pulque y relacionados con la tradición de la barbacoa, son retratados en su estado natural, quemados por el sol, lo que añade un elemento de dramatismo y autenticidad a la pintura.

Este cuadro invita al espectador a apreciar la belleza áspera y la resiliencia del maguey, símbolo de la identidad mexicana. La composición cerrada y el detalle minucioso permiten una conexión íntima con la planta, casi sintiendo la textura de sus hojas y la calidez del sol que la baña.

A través de esta obra, el Maestro Cruz no solo captura un momento y un lugar específicos, sino que también rinde homenaje a la tradición agrícola y cultural de Tezontepec. Es un ejemplo perfecto de cómo el artista transforma sus «cacerías de paisajes» en poderosas representaciones de la belleza natural y cultural de México.